Pasión y excelencia: virtudes que caracterizan a Alba Iris Pérez desde que se unió a la gran familia de Pollo Campero en 1977. Gracias a su actitud de servicio y amor al trabajo, cada cliente que visita el restaurante se siente siempre como en casa.
Su familia es la principal motivación para continuar creciendo y desarrollándose de manera personal y profesional dentro de la corporación. Con más de 40 años de pertenecer a CMI, Alba Iris es un ejemplo de compromiso y se esfuerza siempre por trabajar con responsabilidad para ser un reflejo digno de Guatemala, a quien orgullosamente describe como “un país luchador”.
¡Conoce su historia de éxito en el siguiente video!